Según la patente de P&G registrada en 1970, Alexander Liepa está acreditado como el creador. Los define también como “un pequeño refrigerio y un proceso mediante el cual se prepara una masa, a partir de patatas deshidratadas y agua, frita posteriormente en aceite vegetal”. El diseñador de la maquinaria necesaria para su fabricación es el ingeniero y escritor Gene Wolfe
Hay distintas teorías sobre el origen del nombre “Pringles”. Una se refiere a Mark Pringle, que en 1937 patentó “Método y equipamiento para procesar patatas”. Su trabajo fue citado por P&G cuando registró su propia patente para mejorar el sabor de las patatas procesadas deshidratadas. La otra leyenda está basada en el nombre de la calle Pringle Drive (Finneytown Ohio), donde vivían dos empleados publicitarios de la compañía. Para su lanzamiento comercial se creó una mascota con un característico bigote, “Julius Pringles”, diseñada por Louis R. Dixon.
Con este sabor empezó todo. Pringles fue de los primeros en adoptar la icónica forma de paraboloide hiperbólico (búscalo, es guay) perfectamente apilable dentro de una lata con forma de tubo. Con una historia como la nuestra (nacimos como un invento moderno y llegamos a ser un fenómeno imparable), ¡ya sabes… está claro que no solo te las comes!
Ingredientes
Papas deshidratadas, aceite vegetal, harina de arroz, almidón de trigo, maltodextrina, sal yodada, dextrosa, contiene derivados de trigo (gluten). Este producto está hecho de papa, grasa, harinas y sal.